Amiga, Compañera y Distinguida Funcionaria del INCAP
Quien trabajó durante 20 años desempeñándose como especialista en tecnología alimentaria y coordinadora de la Unidad Técnica de Nutrición y Micronutrientes.
Su calidad humana, compromiso, solidaridad, entusiasmo, optimismo y gran amor por su trabajo dejan huella en el Instituto, en la comunidad Científica de la Región y en los beneficiarios de los proyectos coordinados a través de su gestión.
Muy triste con esta noticia , soy parte de la familia INCAPense , donde Ana Victoria mi compatriota y amiga entero los mejores años de su vida. Siempre dispuesta , comprometida Ana logro hacer una diferencia y así lo hizo en nuestro país y por nuestra Centroamerica desde la institución que amo hasta el último día de su vida .
Perdimos a una gran mujer , incasable profesional y incondicional amiga .
Fortaleza para su familia , Ana siempre estará en nuestros recuerdos .
Excelente madre, profesional y ser humano, siempre brillando, la recordaré siempre y recordare su gran calidez humana. Ha dejado una huella en quienes tuvimos la dicha de trabajar a su lado. Dios le conceda paz a su alma y consuelo a sus familiares.
Mi más sentido pésame a la familia de la Doctora Román y a la Familia Incapense. La Doctora se anticipó a la vida eterna, su legado, calidad humana, profesionalismo, enseñanzas de vida continuarán en nosotras mentes y corazones por siempre. Dios la tenga en su Gloria y le dé paz a su alma. Brille para ella la luz perpetua.
Presento mis sentimientos de pesar y solidaridad, a la familia de Ana Victoria y al INCAP. Nos va a hacer falta. Descansa en paz!
Impactada por la noticia presento mis sinceras condolencias y solidaridad a la familia de Ana Victoria y a la apreciada familia INCAP. Se nos ha adelantado una gran mujer, que nos deja un ejemplo de profesionalidad y humanismo. Mis oraciones a Dios para que le conceda su paz eterna y de a los que le aman resignación y consuelo.
No hay palabras que puedan expresen la tristeza que siente mi corazón ante su partida. Una mujer virtuosa de la que aprendí muchísimo en cada área de la vida, extraordinaria mujer, profesional, esposa y madre. Mis condolencias para su familia y para la familia incapense. Dios los fortalezca y los llene de su paz en estos momentos.
Hasta siempre Ana Victoria!
A los familiares de la Dra. Ana Victoria Roman y al INCAP,por tan irreparrable perdida.
La Republica Dominicana, a traves de la Division de Nutricion reconoce el trabajo sin descanso y lo mas importante de Ana era su calidad humana y compañerismo, se involucraba en todo lo que le pasaba a sus compañeros de trabajos y de los paises; ademas impulso todo lo que tiene que ver con Nutricion, Micronutrientes y Fortificacion de alimentos, nuestros paises estan de duelo por el adelanto de su partida.
Los paises tenemos un reto y es continuar con su legado sobre el trabajo tesonero, con honestidad y lograr las metas de todos nosotros, mejorar la Salud y Nutricion de nuestras poblacion.
Te recordaremos por siempre querida amiga, EPD.
Mi querida Dra. Román, no tengo palabras para expresar tanto amor , cariño y aprecio. Me siento muy triste, su huella y legado no se borrarán jamás. Luchó incansablemente por todo y por todos a su alrededor….. Siempre recordaré su ejemplo en el ámbito laboral, excente calidad de profesional, siempre compartiendo sus conocimientos y dando siempre lo mejor de ella, pero también en el personal… mas de a uno nos dijo…. «siempre hay que hacer el bien…. por nuestros hijos uno no sabe lo que deparará el destino y ellos recibirán las bendiciones del cielo». La quiero Doctora. Siempre la llevaré en mi mente y en mi corazón. Hasta siempre¡!
Que Dios le dé mucha paz y luz en su trayectoria espiritual.
Mis sentidas condolencias a su apreciable familia.
Siempre la recordaré con cariño y admiración, QEPD Dra. Ana Victoria, deja un gran vacío en su querido INCAP.
No hay manera de evitar la tristeza y tener un vacío en el corazón por la pérdida de una irremplazable amiga, quien fue ejemplo de compromiso y dedicación dejándonos un legado de conocimiento, trabajo, esfuezo y abnegación que permanecerán como un eco imborrable en el tiempo.
Sus huellas quedarán grabadas en nuestros corazones y aunque Ana Victoria ya no estará entre nosotros, vivirá por siempre en nostros.
Que Dios le conceda la paz y el consuelo a sus familiares y renueve sus fuerzas para enfrentar este difícil momento.